Una naturaleza indignada que acabará con nuestra especie

Plans presenta su novela El juego de los niños en la Semana Negra

Lunes 25 de julio de 2011. Gijón

Juan José Plans presentando la reedición de su novela El juego de los niños. Foto Toni Gutiérrez

En la Semana Negra también un lugar para los escritores asturianos. Es el caso de Juan José Plans, gijonés, uno de los fundadores de la novela policiaca española. Presenta El juego de los niños, se trata de una reedición de la novela de terror fantástico y ciencia ficción que publicó en 1976 y sobre la que se basó la película de Chicho Ibáñez Serrador ¿Quién puede matar a un niño?

Presenta al autor Jesús Palacios, señalando que Juan José Plans es el señor que más miedo le ha hecho pasar en su vida. De El juego de los niños señala que es una rareza única.

Plans empieza por el final diciendo que es abierto, dejando cauces a la interpretación. Luego nos habla del origen. En los sesenta, con la guerra de Vietnam, se distribuyó una foto de una madre con dos niños muertos. Le surgió la idea de que la naturaleza debería estar indignada contra nuestra especie y se terminaría revelando contra nosotros y eliminándonlos. Y a lo mejor lo hace estableciendo con los niños un cauce de juego natural para eliminar la especie. Es ciencia ficción, pero hay otra versión soterrada de terror. Los seres humanos tenemos siempre implícita la maldad. El miedo que uno domina –el que se ve en una película, leyendo un libro…– es estupendo, se puede cortar cuando uno quiere. Lo que Plans le produce terror es la matanza que ha ocurrido en Oslo, o el hambre en Somalia.

El autor mantiene la opinión de que el libro y la película vieron la luz anticipadamente, en un tiempo que no estaba aún preparado para ella. Recuerda a un padre insistiéndolo a su hijo que no comprase el libro porque en él se decía que los niños matan. No lo había leído, pero había una corriente de opinión que iba contra él. En otro país el desarrollo hubiera sido diferente, pero «ye lo que hay». Volviendo al país, comenta una frase de La mancha que en su tiempo generó cierta polémica. Decía simplemente «una mancha roja que palpita», el rojo era por la sangre, pero hubo quien vio connotaciones políticas: que vienen los rojos.

Los géneros son algo cíclico, algunos de sus autores se van quedando por el camino, por fatiga y cansancio, y se van dedicando a otras cosas. Hubo un boom. Plans empezó en la novela policiaca, le gustaba abrir fronteras. Pero ahora el mercado editorial es muy confuso, con una necesidad de vender algo rápido. Se hacen muchas novelas, lo malo es que no se hace mucha literatura, no se busca el arte.

Preguntado si le tienta preparar una secuela de El juego de los niños, dice que ya la hizo Stephen King con Los chicos del maíz. Es mejor cortar y seguir con otras cosas. Confirma después que va a haber una nueva película que va a versionar la novela y en la que él participa, ya han conseguido como el 70% de la producción y probablemente se ruede el año que viene en México. Mientras llega, está preparando un relato policíaco fantástico y recuperando el dibujo en una novela gráfica muy personal que no sabe si llegará lejos, pero le está permitiendo divertirse.