12FMCE - Día 21-04-2009

No había contado todavía que la ropa que llevan las azafatas del Festival de Málaga de Cine Español es de la firma Desigual; les da un aspecto moderno y son fácilmente distinguibles por sus chaquetas verdes. Hoy ha lucido el sol durante todo el día, aunque al anochecer se ha levantado brisa. En cada corrillo se hablaba de las declaraciones de Juan Marsé sobre la falta de talento y el cine. Se ha convertido en una pregunta un tanto molesta para las ruedas de prensa. Antonio Banderas recogió el guante y, con todo el respeto a Juan Marsé, recordó la película «Si te dicen que caí» basada en un guión de Marsé y en la que Banderas intervino, contó que a él le pareció que en aquella película había talento. Después, volviendo a la actualidad, citó a las actrices, actores y directores que están demostrando su valía a nivel internacional.

En la programación del festival, lo que tocó hoy en la sección oficial de largometrajes fue «Amores locos» y en la de Zonazine «Un ajuste de cuentas». Pero el plato fuerte del día es la gala de homenaje a Miguel de Molina en particular y a la copla en general.

Empecé el día con la rueda de prensa de presentación del documental «La España de la copla: 1908» que se proyectará por la noche en la gala de la copla. Tanto el director como los guionistas insistieron en que el documental estaba concebido como una interpretación política de la copla. Parte de la casualidad, ya que en 1908 nacieron cuatro figuras importantes de este género: Miguel de Molina, Rafael de León, Angelillo y Concha Piquer (también se dice que Estrellita Castro nació en dicho año, pero ella siempre lo negó, dando como fecha seis años después). La coincidencia sirvió de punto de partida, y a través de las anécdotas que les ocurrieron en sus vidas a estos protagonistas, el director reflejó la España de la preguerra. Por la tarde se presentó una nueva oportunidad de escuchar a los mismos ponentes en la mesa redonda sobre la copla y el cine donde se contaron anécdotas y se citó la importancia de la copla en la cultura andaluza, o en los momentos de la guerra dónde sirvió para espantar las penas.

Me quedé también a la siguiente rueda de prensa. Se trataba de una actividad paralela: «Foro de proyectos». Hoy fue la productora de Antonio Banderas (Green Moon) la que presentó una de sus próximas películas «Día roto» del joven director Néstor Dennis. Han terminado el guión y confiesan que será una película de acción sobre un introvertido dibujante de comics que cambia su comportamiento. Se rodará en Málaga durante el mes de octubre. Respecto a la producción, Banderas explicó como se ha financiado la película que a los medios tradicionales (acudir a las subvenciones y a la preventa a las televisiones) han sumado la producción de los estudios de cine de Coín que participan en la proporción equivalente al valor del material que suministran para el rodaje. La prensa se interesó por Banderas, no faltando preguntas de los habituales -todavía no he estado en una rueda de prensa en la que esté Conchita y que ella no haya lanzado una pregunta, me imagino que es habitual de otras ediciones, pues aquí todo el mundo se sabe su nombre-, sobre las declaraciones de Juan Marsé y especialmente por sus proyectos. Me agrada comprobar que es un hombre muy trabajador, además de sincero y directo. Durante la rueda de prensa, el showman Jordi Evolé (el «follonero») se empeñó en entregar la solución al problema del cine. Es curioso, en la tele puede verse de una forma divertida, pero aquí en directo no deja de resultar una intromisión que interrumpe y se aprovecha del magnetismo de personas de reconocida valía. Convertir un acto de trabajo de los periodistas en un burdo espectáculo me parece una falta de respeto.

Para la primera actividad de la tarde acudí a la carpa Sur -en un lateral del teatro Cervantes-. Dentro de «5 minutos de cine» se presentaba el avance de «Castillos de cartón», una película del director Salvador García Ruiz basada en la novela con el mismo título de Almudena Grandes. Salvador contó el argumento como una relación entre tres estudiantes de Bellas Arte. También habló de la importancia que le dio al casting para encontrar a los tres jóvenes que encajasen de manera armoniosa y que a la vez se complementaran, de la intensidad del trabajo y de los dos elementos más importantes en la cinta: el tratamiento del sexo y conseguir representar los comportamientos de los jóvenes en la primera mitad de los 80, los padres de los jóvenes de hoy en día.

Después de un café volví a la carpa Sur para la mesa redonda donde se presentó el libro «Fundaciones Mutantes». Ocho cuentos de diferentes autores con una única premisa, basarse o inspirarse en la primera película de un director español o latinoamericano. Una idea original que defendieron cuatro de los escritores, explicando cada uno de ellos los variopintos motivos que les habían llevado a su elección de la ópera prima.

Me quedé para ver un nuevo «Foro de proyectos». Se trata de la presentación de «La isla interior» que se encuentra en estado de postproducción. Los directores Félix Sabroso y Dunia Ayaso han dado el paso al drama con esta obra, para contar historias alrededor de una familia, mostrando con amargura lo peor de ella y cómo los tres hijos en edad adulta huyen del lastre que supone la herencia genética. Félix y Dunia destilaron buen humor y una alegría contagiosa durante la charla. Ya espero que llegue su estreno previsto para el otoño.

En la sección «Territorio Latinoamericano» y fuera de concurso se proyectó «Paraíso Travel» película que obtuvo el premio del público en la pasada edición del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. Me gustó el tratamiento del tema de la inmigración ilegal en EE.UU., pero sobre todo la estructura que sustenta el guión y que permite narrar la historia con un buen ritmo, compensando a la perfección las situaciones más dramáticas con las pocas alegrías que le van ocurriendo al protagonista. Una película cruda, pero a su vez repleta de solidaridad entre compatriotas.

Cerré la noche con la gala de homenaje a Miguel de Molina. Me resultó extraño venir al Cervantes fuera de los pases de prensa, aunque me sirvió para ver el uniforme de gala del personal del teatro, que se compone de vestido y abrigo. La gala se dividió en tres bloques. Durante el primero se proyectó el documental «La España de la copla: 1908» del que hablé al principio de esta crónica y que, aunque menos valiente en lo político de lo que me esperaba, me resultó interesante, especialmente el ver las diferencias con las que la Historia trató a cada uno de los protagonistas. El segundo bloque consistió en un pequeño concierto ofrecido por Aurora Guirado. Me sorprendió la fuerza de su voz. Interpretó seis canciones y arrancó del público una cerrada ovación al finalizar su actuación. El último bloque subió al escenario a Clara Montes con una voz cargada de matices. Su breve concierto de cinco coplas también resultó espléndido. La actuación se cerró con las dos mujeres cantando «La bienpagá».