La Muestra de Cine de Lavapiés nos prepara para enfrentarnos a los golpes de la vida
Sábado 28 de junio de 2014. Muestra de Cine de Lavapiés. Plaza Xosé Tarrío. Madrid
Cartel de la película Alabama Monroe
Cuando empieza a oscurecer es el momento de proyectar el corto de Carlos Montoya titulado La manzana, una animación de plastilina. Este año hay una querencia especial en la Muestra por dicho material. En este caso se trata de una historia con una manzana y una serpiente, donde hay un poco de tentación y otro de autosugestión y autodefensa.
Si en este mismo espacio el día anterior había tocado reír con Día de fiesta, hoy era el turno de la tristeza. La película Alabama Monroe, de Felix Van Groeningen, es un drama duro y doloroso que te pone al borde de las lágrimas. Quizá una plaza pública no sea el mejor espacio para mostrar esa tristeza, ni permita tampoco la concentración necesaria para seguirla, pues la película tiene una forma de contar que va dando saltos en el tiempo, de un lado hacia otro, por los siete últimos años de una pareja. Van Groeningen obliga al espectador a pasar por diferentes estadios, haciéndole madurar la historia. Arranca con un presente lleno de incertidumbre y mientras éste avanza, la película retrocede a los mejores recuerdos, a los que siguen los más dolorosos hasta acercarnos al final a aquellos que somos incapaces de soportar.
Suena mucho country, la música más triste del mundo, que nos va formando el ánimo y conduciendo por los caminos de la película. Hay leyes de la vida que cuando se rompen nos destruyen. Alabama Monroe va de una de estas situaciones. Pero sobre todo habla de cuando desengañados dejamos de creer, ya sea en la religión o en los Estados Unidos como el mejor país del mundo. Las creencias no se sostienen con la razón y tampoco nos ayudan a hacer más tolerable el sufrimiento. Hay en la película un alegato contra la religión que habla de esto.
La sensación al final es la de que nada le sobra a la película, que cada pedazo está sabiamente puesto para enlazar con otro. Alabama Monroe me parece una película redonda, llena de emoción y muy lejos del sentimentalismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario