sábado, 13 de diciembre de 2008

La ola

Cartel de la película¿Sería posible que en la Alemania de hoy, los nazis volvieran al poder? es la pregunta que un profesor traslada a sus alumnos en la semana de proyectos para explicar la autocracia. La respuesta automática de los estudiantes es «no»; sin embargo, el profesor avanza llevándoles más allá de la teoría. Primero con la fuerza de la unidad (se llega más lejos y se es más fuerte formando un equipo) que con control, ideología y disciplina se convierte en un ejército. Después llega el uniforme para que no existan diferencias, lo que en el fondo nos hace perder nuestra personalidad para anteponer el bien de grupo. Finalmente el marketing que lo convierte en un nuevo régimen al representarlo con un nombre y un símbolo. Los alumnos seducidos por la parafernalia, en tres días, han creado su grupo, excluyente y poderoso, pues cada uno de ellos ha encontrado en esta forma de fascismo algo de lo que estaba necesitado: el solitario consigue hacer amigos por primera vez, el tímido encuentra los mecanismos para alzar su voz y que sea respetada, la enamorada silenciosa se sirve para la conquista del chico que le gusta, el niño rico se topa con un nuevo juego divertido... Pero jugar con los fascismos es peligroso y este experimento pronto se escapa de las manos, al convertirse en una forma de poder que ejercen sobre sus compañeros de instituto e incluso con el resto de la sociedad. Una solución que en manos de una juventud aburrida, sin esperanza de futuro y carente de objetivos comunes avanza imparable. Cuando ven hasta dónde pueden llegar, se plantean que no puede acabar, que les presenta grandes aciertos y que bastaría con solucionar los errores. Es entonces la tragedia y el fanatismo la que les dice que no hay salida por ese camino.

Este es el argumento de «la ola». Película del director alemán Dennis Gansel y con Jürgen Vogel en el papel protagonista del profesor. Aunque algo demagógica, es una película que da lugar a la reflexión, especialmente sobre cómo el fascimos dan protagonismo -colectivo- a los mediocres.



Sabiendo que estaba basada en hechos reales, me preguntaba hasta que punto es fidedigna a la realidad, así que he usado google para saber que se basa en lo que ocurrió en 1967 en Palo Alto (California) cuando el profesor de secundaria de la materia de Historia Ron Jones realizó una recreación experimental de la Alemania nazi con la intención de intentar explicar por qué los ciudanos alemanes permitieron al partido nazi exterminar a millones de judíos, gitanos... El profesor lo transmitió con ideas simples, disciplina en clase, sentido de unidad... y en poco tiempo se creó un movimiento dentro de la escuela con más y más alumnos uniéndose. Así que el profesor detuvo el ejercicio y explicó que dicho movimiento tenía un lider mundial llamado Hitler. Existieron rumores de la implicación de todo este experiento en el suidicio de uno de los alumnos. Posteriormente Todd Strasser se basó en esta historia para escribir la novela titulada «La tercera ola» que es la que adapta Dennis Gansel en esta película.

Sin puntoMedio puntoPuntoPuntoPunto

1 comentario:

Anónimo dijo...

Desde luego este experimento es una demostración de como en una sociedad se pueda germinar facilmente el totalitaarismo, por sus circunstancias, es carne de cañon para resurgir de dicho fenomeno. El ser humano por desgracia es facilmente alienable, sólo necesita un lider y unas reglas básicas. Muy buen articulo como todos los que tienes escrito. Te mando un abrazo desde Málaga